Combinar los estudios con una práctica profesional o empleo es una experiencia cada vez más común entre estudiantes de FP, máster y postgrado. Aunque representa una gran oportunidad para aplicar lo aprendido en el aula, también implica desafíos importantes: gestión del tiempo, presión académica, exigencias laborales y, en muchos casos, el desgaste emocional que puede surgir al intentar cumplir con todo.

Aquí les compartimos algunas reflexiones y estrategias que pueden ayudar a llevar ambas responsabilidades de forma más equilibrada y sostenible.
1. Define tus prioridades con claridad
No todo es urgente ni todo es importante. Aprender a distinguir entre lo que requiere atención inmediata y lo que puede esperar es clave. Una buena práctica es revisar semanalmente tus compromisos académicos y laborales, y establecer metas realistas para cada uno.
2. Planifica con anticipación
El calendario es tu mejor aliado. Usa herramientas digitales para organizar tus clases, entregas, reuniones y tiempos de descanso. Bloquear espacios para estudiar o preparar informes te ayudará a evitar acumulaciones de última hora.
3. Comunica tus tiempos y límites
Tanto en el entorno académico como en el laboral, es fundamental que tus tutores, jefes o coordinadores conozcan tu disponibilidad. La transparencia genera confianza y permite ajustar expectativas. Si estás en prácticas, aprovecha para aprender a negociar tiempos y responsabilidades.
4. Cuida tu salud mental
El estrés puede acumularse sin que lo notes. Busca momentos para desconectar, practicar alguna actividad física, conversar con personas de confianza o simplemente descansar. Recuerda que tu bienestar es parte del éxito académico y profesional.
5. Aprovecha la sinergia entre ambos mundos
Muchas veces, lo que aprendes en clase puede aplicarse directamente en tu práctica, y viceversa. Llevar un diario de aprendizajes o reflexiones puede ayudarte a integrar mejor ambas experiencias y fortalecer tu perfil profesional.
Estudiar y trabajar al mismo tiempo no es fácil, pero con organización, comunicación y cuidado personal, es posible convertir este reto en una etapa de crecimiento acelerado. Desde el Club Alumni, animamos a todos nuestros miembros a compartir sus experiencias, apoyarse mutuamente y seguir construyendo puentes entre la formación académica y el mundo laboral.
¿Tienes alguna estrategia que te haya funcionado? ¡Compártela con nosotros!
